La obligación de difundir la fe
Benedicto XVI en el encuentro interreligioso de Asís (2011)
El ecumenismo pretende alcanzar la unidad religiosa en todo el mundo. Lo mismo que en el caso de la libertad religiosa, la doctrina católica y el modernismo enfocan el ecumenismo de manera diferente, basándose en la comprensión o percepción que cada persona tiene de la verdad.
El modernismo pretende que el conocimiento religioso emana de la persona. Este conocimiento surge del interior, como un impulso subjetivo de la conciencia o del subconsciente, de modo que todas las religiones son más o menos buenas y encomiables, ya que todas manifiestan y representan, de diferentes maneras, el instinto religioso innato del hombre. Así pues, hay tantas interpretaciones diferentes de Dios como hombres hay. Todas esas diferentes nociones de la verdad y de lo divino merecen respeto, por ser todas ellas expresiones legítimas de la mente humana. A través del diálogo mutuo, las diferentes religiones logran entenderse y respetarse mutuamente, y esto a su vez promueve una paz y una concordia mutua saludables.
La religión revelada directamente por Dios
En cambio, la religión católica enseña que ella misma es la única verdadera religión revelada directamente por Dios. Sólo la fe católica puede proporcionar felicidad duradera y verdadera paz, no sólo entre los hombres en esta vida, sino entre el hombre y Dios por toda la eternidad en el Cielo. Dado que Dios quiere que todo ser humano posea esta verdad y esta felicidad, la Iglesia católica tiene el deber de difundir sus enseñanzas y de manifestar su presencia en todos los rincones del mundo, hasta donde le sea posible. Estas enseñanzas proceden directamente de Dios mismo y por lo tanto están exentas de cualquier falsedad, razón por la cual la Iglesia debe alentar con amor a todas las almas, por su propio bien, a que abandonen el error y abracen la verdad.
La doctrina católica, a través del verdadero ecumenismo, defiende los derechos de Dios y promueve la conversión, mientras que el modernismo busca el diálogo y el mutuo acuerdo.